30.5.07

Not only....but also

Lejos de compensar el alto grado de cotidianeidad de tu día, la noche de ayer fue aun más patética. Paso a graficar.

Resulta que tu querida dentista, la misma que te extrajo una muela hace unos meses, ahora te está haciendo un tratamiento de embellecimiento bucal a pedido tuyo. No es que tus dientes estuvieran mal, todo lo contrario, siempre estuvieron muy bien y ahora tenés ese miedo típico de no poder conservar su encanto. La cuestión es que le pediste que te diera un tratamiento blanqueador con la esperanza de que tu sonrisa luciera como la de Anne Hathaway en The Devil Wears Prada.

Si hay algo que siempre te atrajo de la gente es una dentadura blanca y pareja. Asociás esto con algunas características importantes del/la portador/a de dicha perfección, por ejemplo, la pulcritud, los hábitos sanos. Se te ocurre pensar que todo lo que entra y sale por esa boca, no debe ser demasiado perjudicial ya que los dientitos se mantienen ahí, inmaculados. En fin... a eso aspiraste siempre. De ahí la batería de productos que tenés en tu baño: hilos dentales con y sin cera, toothpicks de odontólogo, Crest, Enjuagues bucales de diversos sabores y colores, frasquito de fluor, y ahora tu nueva adquisición, responsable absoluta de tu patético look de anoche.

Las instrucciones rezan:

Realizar la higiene de costumbre con cepillo y pasta.
Pasar hilo dental.
Volver a enjuagar.
Colocar el gel (que no debe romper la cadena de frío) en forma de gotitas dentro de las placas de descanso nocturnas.
Colocar las placas en dientes superiores e inferiores.

Cuando terminaste todo eso, tu imagen en el espejo te devolvió nada más ni nada menos que a JERRY LEWIS!!! Qué horror! Pensaste que para poder salir del baño debías apagar todas las luces y meterte directamente abajo de las sábanas y ocuparte de volver a ser vos antes de que sonara el despertador a la mañana. Pero no, juntaste coraje y abriste la puerta juntando los labios para ocultar semejante esperpento. Por suerte, lograste pasar desapercibida ( en realidad no sabés muy bien si esto es algo que deberías festejar pero teniendo en cuenta las circunstancias, te vino muy bien) y te dispusiste a intentar dormir, lo cual se tornó en una odisea peor que esos reality shows que jamás verías.

El sólo imaginarte durante la noche, con esos socotrocos en la boca que empujaban tus labios hacia afuera cual Botox de última generación, te da aun hoy escalofríos. No por lo que pudo pasar anoche ( de hecho no pasó nada memorable tampoco) sino por anticipar lo que pasarás esta noche otra vez y mañana y pasado y así por quince días!!! Si al menos tu dear dentist te hubiera photoshopeado para mostrarte cómo va a quedar tu sonrisa después de semejante sacrificio, te animarías con más ganas, pero no... mejor googleá una foto de Anne Hathaway sonriendo e imaginá que algo de ese encanto será parte de vos si es que sobrevivís a semejante pesadilla bucal.

2 comments:

Menta Ligera said...

No se que es peor... Parecer Jerry Lewis o arriesgarse a ser la nueva Mujer Desdentada gracias a las "soluciones magicas" del llameya. Cualquier duda o consulta, mejor no llames. Aunque seria bueno que aclaren si el regalo sorpresa es una dentadura postiza...
http://www.sprayette.com.ar/n_ver.php?Id=74

Ladyvina said...

No sé si te caerán los dientes después de este producto. Lo que sí sé es que Ladyvina lo pagó cinco veces más!!!!Ni le contemos!!